No es común que a Medellín se le relacione con una tierra de café, pues este adjetivo se le atribuye sobre todo a los pueblos del suroeste de Antioquia y a la zona cafetera de Colombia conformada sobre todo por los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío.
Sin embargo, para sorpresa de muchas personas, escasos minutos separan a Medellín de tierras cafeteras en esta región, en donde crece y se cultiva el café más suave del mundo.
La Casa Grande Coffee Hacienda en la vía Medellín – Santa Elena, nos transporta por medio del Medellín me encanta coffe tour, a las típicas fincas y casonas antioqueñas del siglo XIX, y a través de la cual, una vez recorriéndola, es fácil caer en cuenta que la cosecha y los aromas y propiedades del café son sus mayores protagonistas.
Además, las comidas típicas que se pueden compartir con la familia Monzons (séptima generación) durante la visita, acompañados por el acogedor canto de las aves, es una experiencia realmente memorable.
Nuestra próxima parada nos lleva a Santa Bárbara, el pueblo del suroeste de Antioquia en el que se lleva a cabo el Tour de Café en la Finca Los Alpes.
Una experiencia para compartir con una típica familia caficultora y apreciar no solo el proceso del cultivo y siembra de café, si no para disfrutar, en medio de un paisaje rodeado de grandes y verdes montañas, de una taza del sabor del típico café colombiano, considerado el más suave del mundo. ❤️
Ubicada a solo 45 minutos de Medellín, la finca cafetera en la que se lleva a cabo el tour para los amantes del café, es perfecta para quienes quieren conocer de cerca el ciclo de vida del café.
Una oportunidad perfecta para interactuar con los caficultores locales y para descubrir dónde y cómo crece el café colombiano, quién lo recoge y porqué es tan apreciado en todo el mundo.
También en Medellín, pero esta vez en el barrio Perpetuo Socorro, una experiencia inmersiva en La Fábrica, nos conduce por su trilladora para entender cómo se procesa el café luego de que llega de las fincas y cómo se evalúa y selecciona para poder ser tostado.
Por su tostadora para vivir de cerca la carrera contra el reloj de un tostador profesional a la hora de poner el café en contacto con el fuego sin arriesgar la materia prima y obteniendo lo mejor de ella.
Y finalmente por una etapa sensorial, en la que podemos oler y probar de manera sencilla las diversas calidades del grano tostado, para comprender lo valioso y complejo de su sabor en la taza final. ☕
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